A parte del retablo, obra de tabla policromada de Dello Delli y Nicolás Florentino, la gran presencia de pinturas murales ha sobrecogido a gran parte de los visitantes de este monumento Patrimonio de la Humanidad.
Desde Almaraduj AMC se ha comenzado una serie de réplicas inspiradas en las pinturas murales de la Catedral comenzando por la Capilla de San Martín o del Aceite ( porque era donde se guardaban las tinajas de aceite para alumbrar la catedral). Al no tener otro acceso que la puerta de entrada la no exposición a la luz ni humedad ha favorecido la conservación de todo el conjunto iconográfico de la capilla lo que la hace una obra de arte medieval.
Antes de entrar un gran mural situado a varios metros de altura evoca la leyenda de San Martin de Tours quitándose la capa para dársela a un pobre harapiento. Se ha reproducido el fresco sobre piedra de Villamayor con intonaco de cal y pintado con pigmentos naturales disueltos en agua.
Atravesando la puerta de acceso nos lleva al sepulcro de Don Rodrigo Díaz, fechado en el siglo XIV, cuenta con un arcosolio con pintura mural de la Adoración de los pastores sobre los emblemas del reino de Castilla y León. Así en el intradós del arco podemos encontrar un paje con los camellos bajo un arco polilobulado y en el otro lateral un obispo.
Tablas estucadas, doradas al agua y policromadas al temple de huevo
A continuación nuestra vista se encuentra con la pintura mural de gran formato del Juicio Final pintada al temple con clara influencia bizantina con la presencia de la Etimasía. Cristo nimbado es ascendido a los cielos rodeados por la corte celestial, la Virgen y los Santos.
Piedra de Villamayor estucada y policromada al temple.
Sin embargo nuestra vista se desplaza a la zona lateral donde una fachada retablo policromada al temple con una hornacina central, ( donde antes hubo un vano) que nos lleva a imaginar la posible ubicación de una talla a San Martin, rodeada de ángeles y en los extremos Santa Ana, San Joaquían, Jeremías , Isaías y Daniel. De nuevo se representan los emblemas de Castilla y León, que por la fecha de construcción de la capilla ya eran un sólo reino ( desde hacía poco más de un siglo).
Piedra de Villamayor estucada y policromada al temple